Masca
Me produce tristeza cuando voy a Masca, un bello caserío de Tenerife colonizado de forma permanente por turistas, esto podría ser normal, y nada criticable, es el fruto de esta industria que hace mantener “estable” la economía de este archipiélago que carece de otros recursos que no sean las bondades del propio territorio.
Lo que en realidad me produce esta tristeza, es ver como engañamos a estos señores con supuestos recuerdos, manjares y licores como “típicos” canarios con la pegatina “made in Taiwan” recién quitada, a buen seguro en otros lugares de este planeta, venden lo mismo como típico.
De cualquier modo, me gusta ir a Teno, admirar su profundo barranco y sus paredes verticales que le juegan una partida a Newton y de momento parece que éstas van ganando.
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