Arranca este blog, sin tener muy claro que es lo que pretendo ni que puedo conseguir con ello.
La motivación surge del deseo de mostrar algunas de las imágenes que voy tomando allí, donde me llevan mis pasos, y poder compartir con ustedes, que las puedan comentar, bien sea como crítica o alabanza a la misma.
Es la fotografía una de mis aficiones, desde siempre he usado cámaras fotográficas, motivado quizás por mi afición al montañismo, que me lleva a visitar lugares muy hermosos de mi tierra, Las Islas Canarias, y de fuera de ella y por la influencia de mi hermano mayor, con quien comparto afición montañera, que siendo yo muy joven, instaló un pequeño laboratorio fotográfico en un armario que él mismo se había fabricado, con un espacio para la ampliadota en B&N y otro para las cubetas, así, por las noches, cuando ya el sol daba paso a la noche, se abrían las puertas de aquel armario y de él salía un “tufillo” a productos químicos y papel fotosensible, y mi hermano revelaba sus fotografías, y yo allí, curioso y expectante, ante el milagro de ver salir una imagen de un papel en blanco inundado en un líquido que llamaba “revelador”.
Creo que ya contaba con 14 ó 15 años, cuando logré compararme mi primera reflex, una Zenith, que no recuerdo muy bien el modelo, con objetivo de rosca de 50 mm, que era el estándar en aquellos años, luego pasé a una Praktica MTL5b, de la que conservo muchas diapositivas y posteriormente una Pentax P30n, igualmente con un objetivo de 50 mm y un Zoom 80-200, que me encantaba, ésta me ha acompañado hasta hace muy poco tiempo.
Al mundo digital entré por la puerta pequeña, compré una pequeña cámara de video JVC GR DV P7 que permitía sacar fotografías y almacenarlas en una tarjeta tipo SD, con una resolución de 1,2 Mp. (que la verdad, es bastante poco) pero el poder ver las fotografía inmediatamente en el ordenador de mi casa, y retocarla con el Photoshop, me abrió un mundo de posibilidades inimaginables anteriormente, si con mi Pentax, sacaba unas diapositivas maravillosas, si es cierto que apuntaba mucho para no errar el tiro, y dejaba muchas fotos sin hacer a poco que las condiciones no lo recomendaran, pues los carretes costaban dinero y no se puede estar jugando con ellos, con la JVC disparaba y disparaba sin parar que ya veremos que sale de todo esto.
Actualmente he podido hacerme con una Nikon D50 con la que estoy encantado, y de las que salen las imágenes que voy a compartir con todos ustedes, también tengo un Nikkor 28-80, un Sigma 70-300 y un Flash Nikon SB-800.
Esta cámara ha conseguido que renazca esta afición, propiciada por la inmediatez de lo digital y las posibilidades de manipulación de las imágenes.
